Aleida Guevara: "Las diferencias sociales contra las que luchaba el Che existen mucho más que cuando él vivió"

Aleida Guevara March asegura que la imagen del Che estuvo siempre viva gracias a la labor de su madre, que trabajó durante toda su infancia "hablándonos sobre mi papá, contándonos sobre su vida, sobre su manera de ser. Y nosotros lo amábamos. Lo conocimos así, siendo un magnífico revolucionario".

A pesar de la ausencia paterna que marcó sus vidas, Aleida, que al igual que su padre escogió la carrera de medicina, dice que "a veces los hombres grandes tienen que sacrificar las cosas más simples de la vida y más hermosas porque saben que tienen que hacer algo mucho más importante para otros seres humanos, y ese desprendimiento es lo que nos hace sentir que mi papá es un hombre muy especial, por tanto, lo amamos".

A veces los hombres grandes tienen que sacrificar las cosas más simples de la vida y más hermosas porque saben que tienen que hacer algo mucho más importante para otros seres humanos"

Al referirse a Fidel Castro, a quien siempre ha llamado "mi tío", la mayor de los cuatro hijos del Che asegura que estableció una relación "muy estrecha con Fidel desde los inicios de mi vida y eso yo pienso que ayudó a comprender mejor quiénes eran estas personas. Y de verdad yo tengo este privilegio tan extraordinario, y es haber convivido con ellos, haberlos conocido tan íntimamente. Eso me hace sentir una mujer muy especial".

"El Che no podía mentir"

Aleida cuenta una anécdota de la época en la que su padre y Fidel fueron apresados en México junto a otros compañeros revolucionarios. Fidel había dado la orden de no revelar su afiliación política, pero el Che no fue capaz de mentir y además terminó discutiendo con el guardia de la cárcel sobre la personalidad de Stalin, por lo cual no fue liberado al tiempo que los demás.

"Y esa misma acción de Fidel que no se va de México hasta obtener la libertad de mi papá poniendo en riesgo todos los preparativos que habían tenido para venir para Cuba, eso marcó el inicio de una amistad extraordinaria entre Fidel y mi papá".

La imagen del Che se puede ver hoy en cualquier rincón del mundo, la gente compra los objetos con su rostro. Este fenómeno es entendido por Aleida, quien le da un poco más de trascendencia. "Siempre trato de decirles que las imágenes pueden ser vacías, lo importante es llenarlas de contenido, llenarlas de su obra, de su vida, conocerlo realmente".

Colombia, Bolivia y Venezuela

Sobre el proceso de paz que adelantan las FARC con el Gobierno colombiano en La Habana, ella dice que "es una decisión de los que están trabajando, de los que están luchando, desde aquí tú no puedes juzgar lo que está haciendo un movimiento o un pueblo, eso es inaceptable porque tú no vives esa realidad. Lo que ellos decidan yo tengo que respetarlo".

Al preguntarle sobre la posible reacción que tendría el Che si pudiera ver lo que ocurre hoy en día en la región, Aleida fue bastante directa. "Desgraciadamente todavía las diferencias que hicieron que el Che tomara conciencia social existen, y existen mucho más que en la época en que él vivió. Pero en los últimos años ha surgido un movimiento interesante de tomar conciencia de pueblo. Claro, él estaría feliz de tener un presidente indígena como Evo Morales, yo pienso que él trataría de apoyarlo".

"El movimiento en Venezuela, una revolución bolivariana. Un presidente que por primera vez hace dueño al pueblo de su petróleo, de sus recursos naturales. Eso es único en el mundo. Entonces esas cosas imagínate cómo pondrían al Che, ya estaría apoyando a Chávez en todo lo que pudiera", concluyó la hija del Che.